¿Qué hacemos con los dispositivos frente a atragantamientos?

Esta es una pregunta que me han realizado en varias ocasiones en las últimas semanas, sobre todo a raíz de que se están intentando introducir en los colegios a través de las AMPAs.

Por un lado tenemos un problema importante, ya que el atragantamiento es una de las principales causas de muerte accidental.

Actualmente existen dos dispositivos comercializados, que funcionan por succión de la vía aérea (similar a un desatascador), y que son capaces de generar una fuerza de succión hasta 4 veces superior a las compresiones torácias y abdominales.

Sin embargo… ninguno de los dos tiene el aval de ninguna entidad médica oficial, al no existir investigaciones médicas que respalden la evidencia de su utilidad ni su seguridad, especialmente en la edad pediátrica, y más aún, no esta claro que la presión de succión que generan no sea dañina para los tejidos en los niños. Las únicas reseñas que podemos encontrar publicado al respecto son casos aislados que publicitan las empresas que los venden, estudios en maniquíes y un ensayo en cadáveres.

Sin embargo, si disponemos de unos protocolos de maniobras de Reanimación Cardiopulmonar y Desobtrucción de la vía aérea que si están avalados científicamente y que forman parte de las Guías Clínicas y Protocolos de todas las sociedades científicas a nivel mundial que deberían ser conocidos por toda la población, así como las medidas de Prevención y los objetos, alimentos y demás sustancias que son susceptibles de provocar un episodio de obstrucción de la vía aérea.

Los que se refieren al tratamiento de los atragantamientos los podéis recordar en este post: «Maniobras de Desobstrucción de la vía aérea» .

¿No sería más sencillo fomentar la formación en estas técnicas validadas cientificamente?

Yo tengo claro que el compromiso debería ser que todas las personas que trabajan con niños, en restaurantes, servicios públicos o zonas de gran afluencia de personas tuvieran acceso a esta formación, con esa medida probablemente consiguiéramos salvar muchas más vidas que con la simple presencia de estos dispositivos.

¿Significa esto que estos dispositivos no son útiles?

Probablemente no… de hecho han demostrado una utilidad teórica en situaciones complicadas (obstrucción de la vía aérea en la que no sean efectivas las maniobras clásicas de desobstrucción y RCP), pero hacen falta estudios con base cientifica que avalen su eficacia, seguridad y momento óptimo de uso dentro de la secuencia de desobstrucción y reanimación.

Y por supuesto, lo que hay que tener muy claro es que su presencia no debe generar una falsa sensación de seguridad y relajar la PREVENCIÓN y la formación en Maniobras de RCP y Desobstrucción de la vía aérea.

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